Ridículo
Qué ridículo. Han pasado más de 7 años y te recuerdo y extraño cada día. En momentos en familia, en partidos de futbol, en logros alcanzados, en frustraciones, en alegrías, en enojos y en tristezas. En un día tan cotidiano, en un día tan... como hoy. Y pensar que estoy a un par de días de vivir uno de los momentos más importantes de mi vida. ¡Cuánta falta me harás, papá! Y pensar que estoy por cumplir un sueño que no soñé y que jamás imaginé que no estarías para acompañarme. Es ridículo pensar que no estás, porque te veo cada día en el amor con el que formaste nuestra familia al lado de mamá. Es ridículo porque te escucho en cada duda que tengo y en cada decisión que tomo. Te veo en mi gusto por la cerveza y por el futbol. Es ridículo porque recuerdo con tanto amor las historias que me contabas cuando buscaba un consejo. Es ridículo decir y pensar que no estás si tu esencia quedó impregnada en nosotros. En nuestra unión que tenemos como familia. En nu...